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jueves, 24 de diciembre de 2020

FUNCIONES DEL ORGÓN EN LA FORMACIÓN DEL CLIMA ( IV )

 Aquí tenéis la continuación del articulo que subimos al blog el pasado 19 de diciembre sobre las funciones del Orgón en la formación del clima.

El articulo fue escrito por Wilhelm Reich.  

Primera versión escrita en el verano de 1943. Revisada y expandida en el verano de 1946. Traducida del alemán por  Derek y Inge Jordan. Nosotros hemos realizado la traducción del inglés al castellano. 

Con esta entrada queda completado todo el artículo.






                         FUNCIONES DEL ORGON EN LA FORMACION DEL CLIMA


                                                                Wilhelm Reich


( Continuación...)


LA FORMACION DE LA BRECHA EN LA ENVOLTURA DE ORGÓN DE LA TIERRA

El movimiento del orgón atmosférico, es decir, de la envoltura de orgón del planeta tierra, también está vinculado con la formación de las nubes. En mi informe provisional sobre la demostración de un fenómeno de orgón físico, describí, entre otras cosas, la dirección oeste-este del movimiento del orgón atmosférico. Este movimiento ondulatorio es fácil de observar con un telescopio capaz de aumentar unas 60 o 80 veces. Cuando las nubes comienzan a formarse en el oeste, el movimiento normal se invierte y se ejecuta de este hacia oeste. Aquí hay varias fases distintas en esta inversión. El movimiento oeste -este en al principio baja la velocidad, luego se detiene, en ese momento el movimiento del orgón ya no es visible. Poco después de esto la dirección del movimiento se invierte de este a oeste. Una vez que termina la lluvia y el clima se ha despejado, el movimiento regresa a su dirección original oeste-este.

Si la inversión del movimiento dura varios días, con mal tiempo prevaleciendo todo el tiempo, entonces la fase de compensación es a veces seguida por un fuerte viento soplando de oeste a este. La siguiente asunción parece más capaz de explicar este viento.

Obviamente un “agujero” o “brecha” se crea por la inversión de la dirección del movimiento en el punto donde una parte se mueve hacia el este se separa de la parte que se mueve hacia el oeste.




De esta forma, la envoltura de orgón se adelgaza en el punto de la separación entre la dirección oeste-este y la dirección este-oeste. La inversión de la dirección en sí es fácil de entender. Ya que le sistema de orgón más fuerte siempre atrae al sistema más débil, las nubes atraen el orgón de las áreas adyacentes, aumentando así de tamaño a medida que aumenta el vapor de agua concentrado. La “brecha” se revela por la reacción del electroscopio. Las descargas del electroscopio se aceleran hasta unas pocas unidades de segundos-org, que corresponden a una baja concentración de orgón. Por lo tanto, encontramos que cuatro funciones principales coinciden:

1.     1.  Una caída en la diferencia de temperatura, To-T;

2.      2Una aceleración en las descargas del electroscopio hasta el nivel de un segundo-org;

3.    3.Una inversión en la dirección del movimiento del orgón atmosférico en las áreas al este de la formación de las nubes;

4.      4.Cese de las oscilaciones espontaneas del péndulo; alteraciones en la reacción del Geiger-Müller hasta que desparece por completo.4

Estos fenómenos están funcionalmente vinculados y apuntan a la formación de la brecha de orgón como resultado de la densificación del orgón atmosférico en el banco de nubes.

No tengo nada más que decir sobre el problema en este momento. Pero está bastante claro que una puerta ha sido abierta ahora para que se realicen estudios mucho más detallados sobre la formación de las condiciones del clima.

 

4 Cf. Reich, The Cancer Biopathy and The Oranur Experiment. (Eds.)

 


¿Viste la otra noche como los destellos eran como el fenómeno en el cuarto oscuro? ¿Alternando destellos suaves y largos con chispas de luz repentinas? Es muy importante observar el mismo fenómeno natural que ves en el laboratorio afuera en la naturaleza.

Wilhelm Reich








sábado, 19 de diciembre de 2020

FUNCIONES DEL ORGÓN EN LA FORMACIÓN DEL CLIMA ( I I I )

Aquí tenéis la continuación del articulo que subimos al blog el pasado 7 de diciembre sobre las funciones del Orgón en la formación del clima.

El articulo fue escrito por Wilhelm Reich.  

Primera versión escrita en el verano de 1943. Revisada y expandida en el verano e 1946. Traducida del alemán por Derek y Inge Jordan.

Nosotros hemos realizado la traducción del inglés al castellano.


                                   


                        FUNCIONES DEL ORGON EN LA FORMACION DEL CLIMA


                                                                Wilhelm Reich


( Continuación...)


Por otro lado, el hecho de que el agua absorbe el orgón evita tales contradicciones. La asunción imposible de que las cargas eléctricas positivas aisladas ocurren en agua no disociada puede entonces ser reemplazada por la teoría de que partículas de agua teniendo cualitativamente idénticas cargas se atraen entre sí. Este es un proceso que coincide con las propiedades básicas del orgón. Cada nube en sí misma forma un sistema orgonótico compuesto por partículas de agua cargadas de orgón que se fusionan. Las nubes se asocian, fluyen juntas, y se fusionan. En el proceso, las cargas de orgón se concentran.

Una vez que dos o más nubes se han mezclado, las diferencias en tamaño y densidad se pierden en una masa uniforme azul-gris más o menos uniforme. Si se emitió un rayo cuando el sistema de nubes individual se fusionó, el rayo cesa gradualmente a medida que el mar de nubes se convierte en una masa uniforme, es decir, ya no hay sistemas orgonóticos individuales que se puedan combinar con otros mientras generan destellos o luz.

Densas, pesadas nubes de tormenta tienen un profundo color azul-gris el cual no es impartido por el azul del cielo. El azul del cielo detrás de las nubes está de hecho oscurecido, y las nubes son demasiado densas para permitirnos verlo. El azul-gris de las nubes de tormenta debe por lo tanto ser debido a su carga de orgón.

Estamos ahora en una posición para entender, sin ninguna dificultad, no sólo el fenómeno de los destellos ( sheet lightning) sino también el de los relámpagos (lightning flash) que ocurren entre dos sistemas en las nubes. Si la nube vacía su contenido de agua sobre el suelo, las cargas de orgón son liberadas. Antes de que la energía orgónica  se distribuya uniformemente en toda la atmosfera y se restablezcan las buenas condiciones climáticas, deben existir diferencias aquí y allá en la concentración de orgón libre que son igualadas por el desarrollo de fuertes destellos de iluminación. Los destellos ( sheet lightning) son fundamentalmente nada más que una manifestación extremadamente intensa de los brillos normales de la energía orgónica que es vivible en el cielo oscuro en noches despejadas. Es así no un fenómeno separado y peculiar que ocurre únicamente bajo determinadas circunstancias. De hecho, podemos decir que el fenómeno al que llamamos destellos (sheet lightning) esta teniendo lugar todo el tiempo, pero a tal reducido nivel o intensidad que no lo podemos apreciar a simple vista durante el día, y por la noche necesitamos usar el orgonoscopio para poder verlo. Con igual facilidad, podemos explicar el destello (flash) de luz ( lightning) de la tormenta entre dos nubes como la transferencia de energía entre dos sistemas orgonóticos cuando entran en contacto entre sí. La diferencia ente los destellos (sheet lightning) que se extiende por el cielo y la luz( flash) o rayo (lightning) que tiene lugar en una tormenta, está determinada únicamente por la extensión en que el orgón se concentra por unidad de volumen de espacio.

Los relámpagos (lighting flash) corresponden al desarrollo de cantidades extremadamente grandes en un espacio muy pequeño. Los destellos (sheet lightning) corresponden a la igualación de diferencias en la concentración de orgón sobre  amplias áreas de la atmosfera.

Un relámpago (lighting flash) entre una nube y la tierra obedece a la misma ley: la tierra es un sistema de orgón y la nube es el otro sistema más pequeño. Ya no es necesario asumir que los dos sistemas están cargados de forma opuesta. Ya sabemos que el orgón tiene la propiedad, que no es compartida por otra forma de energía, de crear una gran concentración atrayendo pequeñas cantidades de orgón. La energía orgonica de la tierra en consecuencia atrae la energía orgónica de la nube de la misma forma que una gran nube atrae a la mas pequeña. Los destellos de iluminación así, ocurren entre nubes y la tierra de la misma forma que entre dos nubes. Las cantidades de energía involucradas son enormes. De acuerdo con cálculos de disponibilidad, cada relámpago (lighting flash) contiene millones de voltios. Esto nos recuerda que nuestro estático electroscopio, al que podemos cargar fácilmente frotando nuestro pelo, requiere varios cientos de voltios de electricidad para cargar al mismo nivel. Hay, pues, acuerdo entre esos dos conjuntos de hechos. No puede ser electricidad sino más bien el orgón el que opera en las tormentas.

El proceso de la formación de las nubes nos ha enseñado a reconocer dos direcciones de funcionamiento opuestas a las que podemos referirnos como los estado o funciones antitéticas del orgón. La densificación o concentración del orgón es contrastada con la dilución o disociación del orgón. Volveremos a encontrarnos otra vez con estas dos funciones orgónicas en la esfera de lo vivo.


( continúa....)


lunes, 7 de diciembre de 2020

FUNCIONES DEL ORGÓN EN LA FORMACIÓN DEL CLIMA ( I I )

 Aquí tenéis la continuación del articulo que subimos al blog el pasado 15 de octubre sobre las funciones del Orgón en la formación del clima.

El articulo fue escrito por Wilhelm Reich.  

Primera versión escrita en el verano de 1943. Revisada y expandida en el verano e 1946. Traducida del alemán por Derek y Inge Jordan.

 Nosotros hemos realizado la traducción del inglés al castellano.




FUNCIONES DEL ORGON EN LA FORMACION DEL CLIMA


Wilhelm Reich


( Continuación...)


Este hecho coincide con otros dos fenómenos que se derivan de la velocidad de descarga del electroscopio. Los gráficos adjuntos muestran tres tipos básicos de fluctuaciones atmosféricas en la tensión de la energía del orgón atmosférico: En un día claro seguido por otro día claro; en un día claro soleado seguido por un día lluvioso; y finalmente en tres días sucesivos con diferentes condiciones de sol o nubes, pero sin lluvia.

El primer grafico fue trazado el 21 de julio de 1941 en Oquossoc, Maine. Podemos ver que hasta alrededor de las 5:30 p.m. las descargas del electroscopio se incrementaron en una curva uniforme más o menos, es decir, tuvieron lugar más y más despacio. Desde las 5:30 p. m. hasta las 10 p.m. la curva desciende otra vez en una forma uniforme y las descargas del electroscopio ocurren un poco más



 rápidamente ya que las mediciones se realizan cada hora. El 22 de julio y el 23 el tiempo era soleado y claro. El tipo de curva es el mismo en ambos días, excepto que una pequeña cantidad de precipitación ocurrió el 22 de julio y aproximadamente 8:30 a.m. Durante un breve periodo de 10 segundos_org tensión. No se habían tomado medidas la noche anterior, por lo tanto, sólo se puede asumir que la tensión había disminuido. Podemos deducir de esas curvas que durante todo el día el orgón estaba uniformemente distribuido en la atmosfera; no hay diferencias en la concentración. Por otro lado, la bajada y subida uniforme en las curvas diarias indica que la densidad del orgón generalmente aumenta y disminuye en todas partes. Hasta las 5:30 p.m. los niveles de orgón se acumulan en la atmosfera y se vuelven más “tenues” de nuevo cuando el sol se pone. La disminución en la tasa de descarga del electroscopio en las horas cálidas de alrededor del mediodía va en contra de la visión de que la energía involucrada es eléctrica, se supone que debido a la radiación más intensa se produce una mayor acumulación de energía eléctrica en el aire, el electroscopio se descargaría más rápidamente y no más despacio durante las horas del mediodía. Para explicar la curva en el primer gráfico, no tendría sentido asumir que la cantidad de energía es mayor temprano en la mañana y tarde en la noche y cae a su nivel más bajo al mediodía cuando el sol es más fuerte. Por otro lado, estas mediciones coinciden con las diferencias en la tensión orgónica medida dentro y fuera del acumulador de orgón1.

La concentración de orgón en el aire depende directamente de la intensidad de la radiación solar. Esto está también confirmado por la fuerte subida en la diferencia de temperatura To-T2 medida a nivel del terreno y el hecho de que el plato de pesaje cae.

El segundo grafico presenta una imagen diferente. En el 16 de julio de 1941, las condiciones del clima en Oquossoc, Maine, eran claro y soleado todo el día, tal como eran el 21 de julio. Pero, en este caso, después de un aumento constante en la curva has las 4p.m., vimos una rápida y completa caída de 14 minutos-org a 10 segundos-org dentro de un periodo de media hora. Después de esto, la curva de la tensión del orgón ya no subió, pero fluctuaba en el nivel de los 10 segundos-org hasta altas horas de la



 noche. Ocho horas después de la repentina bajada en la curva se produjo una lluvia muy fuerte que duró toda la noche y el día siguiente. A las 8 a.m. del 17 de julio la tensión de la energía atmosférica era solo de alrededor de 1segundo-org. Permaneció en esta baja concentración hasta las 10 a.m. y luego se levantó a la cantidad e 4 minutos-org a las 4 p.m. mientras que desde las 5 a las 9 p.m. retrocedió a 1 minuto-org. Esto significa que la energía orgónica desapareció de la proximidad del electroscopio, es decir, de las áreas cerca del terreno, aproximadamente alrededor de las 4:30 p.m., y después reapareció a medianoche, en concentraciones locales a niveles más altos, como nubes de tormenta cargadas. A medida que la atmosfera se aclaró, la concentración original uniforme y más densa del orgón reapareció y esto se reflejó en las correspondientes curvas diarias de los niveles más altos.

Alternativamente un tiempo soleado y nublado prevaleció en los tres días sucesivos desde el 1 al 3 de agosto de 1941. Las fluctuaciones diarias del orgón eran irregulares. En cada caso, había una bajada repentina de tensión que no ocurría de manera consistente en los días soleados. Al mismo tiempo, o poco después de que se produjera esta caída, se formaban las nubes. La curva siempre subía cuando, o un poco antes, el sol se abría paso; y siempre caía cuando el cielo ya estaba nublado o se formaban las nubes.

Tomados en conjunto junto con todas las demás observaciones, sólo hay una interpretación que responde satisfactoriamente a todos estos fenómenos: la formación de nubes va con la disipación de orgón libre de las capas inferiores de la atmosfera. La curva de tensión, por lo tanto, debe caer puesto que la tensión es reducida en la superficie de la tierra. Además, una vez que la nube se ha formado necesariamente bloquea la radiación orgónica emanada desde el sol y evita que llegue a los niveles más bajos de la atmosfera. La curva de la tensión orgonica atmosférica en consecuencia permanece baja, de hecho, puede incluso continuar bajando. Pero nunca baja tan bajo como antes de los aguaceros fuertes y duraderos. Si las nubes son dispersadas otra vez por el viento o oros factores, la curva de tensión sube hasta que alcanza aproximadamente valores normales. La radiación solar del orgón puede una vez más penetrar en los estratos atmosféricos más profundos. La tensión de la energía atmosférica crece.

Esta correlación entre las fluctuaciones en la curva de tensión y la aparición o desaparición de las nubes nos permite extraer la siguiente conclusión:

La aparición de nubes indica que el orgón de los estratos bajos de la atmosfera se ha concentrado, junto con el vapor de agua atmosférico, en un punto más alto en la atmosfera. Cuanto más cálidos son los rayos del sol, es decir, cuanto más alta y pronunciada es la subida anterior en la curva de la tensión del orgón atmosférico, cuanto más rápido la concentración del orgón local que puede reunirse, se podrán formar las nubes y la lluvia caerá. Cuando una tormenta surge de la nada inesperadamente, es debido a una repentina concentración del orgón más vapor de agua. Sabemos que el orgón es fácil y rápidamente absorbido por el agua ya que cualquier clase de material cargado de orgón se puede descargar humedeciéndolo. Las partículas de agua cargadas de orgón en el aire fluyen unas hacia las otras y se mezclan. Como resultado, las partículas de agua se concentran y se hacen mas grandes. La lluvia empieza a caer cuando las partículas de agua fusionadas se hacen demasiado grandes para permanecer en suspensión en el aire.

­La asunción de que el vapor de agua se condensa en estratos más altos “más fríos” de la atmosfera me parece incorrecta puesto que en los días cálidos de verano las nubes pueden formarse en las capas cálidas del aire cercanas a la superficie de la tierra. En efecto, los montañeros que escalan en los días cálidos de verano saben que hasta altitudes de 3000 o 4000 metros, la temperatura del aire permanece prácticamente la misma y, si acaso, tiende a incrementarse. Por otro lado, se forman nubes en regiones mucho más bajas de la atmosfera.

Cuando nos paramos en los picos de las altas montañas, miramos hacia un mar de nubes muy por debajo de nosotros. En consecuencia, la condensación de vapor de agua a baja temperatura no puede ser el factor responsable para la formación de nubes. Pero tampoco puede ser la electricidad la que reúne en el contenido de agua de las nubes. El agua de lluvia no contiene absolutamente sales minerales; es “blanda” comparada con la “dura” agua cargada de sal encontrada en ríos y mares. Es difícil imaginar como las cargas eléctricas pueden acumularse en agua sin sal puesto que tales cargas sólo pueden adherirse a los átomos en forma de iones. El agua en si no esta disociada en H y O en la nube y por lo tanto no puede ser la portadora de cargas eléctricas. Y es totalmente inconcebible que la nube tiene una “eléctrica positiva” carga puesto que entonces H cargado positivamente tendría que disociarse de O. No podría haber lluvia, puesto que la lluvia consiste en el neutral H2O.

La asunción de que los electrones se adhieren a las partículas de agua tampoco resiste la verificación puesto que, primero, es altamente improbable que tal adhesión tuviera lugar; segundo, en tal caso las partículas de agua de las nubes tendrían de estar cargadas negativamente´. No podrían estar cargadas positivamente, puesto que entonces no habría relámpagos, ya que se supone que la tierra está también cargada negativamente. ¿O es posible que los positrones se unan a partículas no disociadas de agua? En resumen, todo el concepto que las nubes llevan una carga eléctrica positiva es incorrecto y confuso.

 

( Continua...)

jueves, 15 de octubre de 2020

FUNCIONES DEL ORGÓN EN LA FORMACIÓN DEL CLIMA ( I )


Hoy compartimos en el blog la traducción de una parte del interesante artículo escrito por Wilhelm Reich sobre Las funciones del Orgón en la formación del clima.

La meteorología orgonómica no es como la meteorología tradicional, que es mecanicista. La meteorología orgonómica es funcional en dirección Sur podemos observar un estado de la atmósfera  y dirección Este otro. Puede haber más carga en un lugar y menos carga en otro. En la observación intervienen : lo observado, la observación misma y la persona que observa ( la parte subjetiva).





FUNCIONES DEL ORGON EN LA FORMACION DEL CLIMA*


Wilhelm Reich


Estoy obligado en seguir la línea que es dictada por mis observaciones de la energía orgónica. No es mi propósito aquí plantear problemas meteorológicos, y mucho menos resolverlos. Sin embargo, la dependencia de la terapia orgonómica con la energía de las condiciones atmosféricas inevitablemente me obliga a presentar observaciones de naturaleza meteorológica y astronómica. En efecto, tales observaciones algunas veces arrojan luz en la oscuridad sobre estos campos bastante remotos de la ciencia. Naturalmente uno no puede simplemente ignorar este hecho. No seria apropiado aquí examinar en detalle la serie de teorías que han sido concebidas a lo largo de los siglos para explicar el fenómeno de la formación del clima. La investigación de orgón saca a la luz nuevos y diferentes hechos que no podemos evitar chocar aquí y allá con las opiniones habituales expresadas sobre el tema del clima. Permitirme citar un ejemplo para demostrar lo mal que te puedes enredar en contradicciones insolubles de fenómenos tales como la formación de las nubes y los rayos que se abordan únicamente con la usual teoría de la electricidad positiva y negativa, y si se intenta entonces reconciliar esta teoría con los fenómenos orgonóticos observados. La visión predominante es que el aire caliente se eleva hacia las regiones más altas y frías de la atmósfera, llevando con él el vapor de agua contenido en el aire. Una vez que alcanza las regiones más frías, se dice que el vapor de agua se “condensa” en gotitas extremadamente finas. Esas gotitas entonces absorben “electricidad positiva del aire” y se forman las nubes. Como resultado, una tensión se acumula entre la carga positiva de las nubes y la tierra cargada negativamente, y esta tensión es descargada en un rayo.

Cualquiera que trate con el fenómeno de la energía orgónica tiene una gran dificultad al tratar de entender esta teoría y se ve envuelto en contradicciones insolubles. Sobre todo, la teoría falla al explicar el fenómeno del rayo entre dos nubes el cual no cae a tierra. Se deduce de esto que debe haber dos fuentes diferentes de rayos. Primero está el rayo causado por la descarga de electricidad entre las nubes cargadas positivamente y la carga negativa de la tierra. Segundo está el rayo causado por las descargas entre las nubes cargadas positiva y negativamente. Incluso si aceptamos tal complicada interpretación, todavía queda sin explicación el fenómeno de rayo de hoja que tiene lugar en amplias áreas de cielo despejado.

La teoría eléctrica de la formación de las nubes no nos dice nada sobre el origen de la “electricidad atmosférica positiva”. El aire contiene solamente mínimas cantidades de electricidad libre y es también un aislante extremadamente bueno. ¿Cuál, es entonces, la fuente de las cantidades gigantescas de energía- en el orden de varios millones de voltios, que se descargan en un relámpago?

Sentimos, por lo tanto, que la admisión de un gran número de físicos y astrónomos de que el fenómeno de la formación del clima no tiene explicación se acerca mucho más a reflejar el estado actual de nuestro conocimiento sobre el tema. Por ejemplo, Warburg escribe en su Física Experimental (Física Experimental (24 Edición, 1933, p.222):

“De hecho, el relámpago es una corriente eléctrica por medio de la cual una nube cargada eléctricamente, es decir, una nube de tormenta… es (no posible) decir con certeza cual es el origen de este campo de fuerza eléctrica sobre la superficie de la tierra.”

Basándose en las propiedades fundamentales de la energía orgónica que conocemos, vamos a ver si pueden explicar cualquier fenómeno meteorológico, y si es así, cuáles.

Hay una vieja regla entre los agricultores que establece que antes de que llueva, las montañas parecen estar cerca y claramente visibles sin ninguna neblina. Por otro lado, en los días buenos, que no son seguidos por la lluvia, las montañas están envueltas en una “neblina” que les da una apariencia general gris azulada. Las montañas parecen estar muy lejos. Nos tropezamos con aquí con la palabra “neblina”. Esta neblina es de color gris-azulado. Sin embargo, el vapor de agua es opaco, y cuando se acumula como niebla temprano por la mañana sobre los valles es gris y no gris-azulada en apariencia. Sabemos que el orgón es gris-azulado y que el agua absorbe el orgón. La neblina azulada frente de las montañas distantes puede ser por lo tanto vapor de agua conteniendo orgón que desaparece antes de la aparición del agua de lluvia.

( Continúa...)

 

*Primera versión escrita en el verano de 1943. Revisada y expandida en el verano e 1946. Traducida del alemán por Derek y Inge Jordan.

 

lunes, 18 de mayo de 2020

METEOROLOGIA ORGONOMICA






Actualmente estamos viviendo la pandemia del Covid-19. Una plaga que implica una enfermedad altamente infecciosa y que afecta, ahora ya, a todos los países. 

También la plaga emocional se caracteriza por ser una enfermedad altamente infecciosa, contagiosa y destructiva y que, como otras plagas también puede ser mortal.

De igual forma la Energía Vital (energía Ogónica) presente en la atmósfera puede enfermar. 

Wilhelm Reich describió en 1951 y llamó DOR (Deadly Orgone Energy) a la transformación de la energía orgónica del planeta en una forma de energía muerta, que roba la vitalidad, al agua y el oxígeno a los seres vivos.

Hoy compartimos en el blog la traducción de una parte del artículo : Le fonctionalisme orgonomique appliqué à la météorologie: La sécheresse. publicado en la revista Sciences orgonomiques 6e Année Nº 17/18-1991 por el Dr. Richard Blasband.




La teoria de Wilhelm Reich sobre la formación de los desiertos



En 1951, Reich describió por primera vez la energía orgónica mortal (DOR) (4; p.278) Irritando la energía orgónica concentrada con pequeñas cantidades de radio, Reich encontró que el orgón se volvía extremadamente excitado, febril. En este proceso de “reacción oranur “como lo llamó Reich, se liberaba una forma toxica de energía de energía orgónica. Su presencia era percibida por signos y síntomas de enfermedad: sensaciones de asfixia, migrañas, congestiones nasales, náuseas, diarreas y reacciones emocionales irracionales. Según Reich cuando está presente en la atmósfera, uno tiene la sensación de que todo está envuelto de oscuridad o en el mejor de los casos, de tristeza. No es algo que “entre en el paisaje” sino más bien” la chispa de la vida que se escapa” (5). Los pájaros y los animales disminuyen sus movimientos; las ramas de los árboles cuelgan perdiendo su turgencia y su aspecto erguido; el color y la luz pierden su intensidad y su brillo.

La aparición de nubes de DOR en mayo de 1952 empujó a Reich a desarrollar su cloudbuster conectando tubos de metal hueco al agua i dirigiéndolos a ciertas direcciones especificas pudo “atraer y hacer desaparecer” las nubes nocivas. Búsquedas ulteriores mostraron que, utilizando el rompedor de nubes, se podían también realizar un cierto número de cambios climáticos haciendo llover y suprimiendo la niebla.

En 1953, por tercer año consecutivo, la reacción DOR en Orgonón – el lugar del laboratorio de Reich- se intensificó considerablemente en el equinoccio de primavera. La reacción fue tan importante que el laboratorio fue inhabitable durante meses. En el equinoccio de otoño la reacción disminuía, como en los años precedentes. Por esta razón y algunas otras, Reich comenzó a pensar que el DOR y su contrapartida “pre-atómica” recientemente descubierta (el melanor) eran de origen cósmico. El melanor es una sustancia negra que se deposita sobre la superficie de las ramas de los árboles y de las rocas. Íntimamente asociada a la presencia de DOR, el melanor no se puede, al igual que el DOR, explicarse simplemente como siendo “polvo”, “hollín”, “humo”, “niebla”, o “smog”. Entre otras cosas, estas “explicaciones” no pueden explicar su intenso efecto biológico, el hecho de que se observen en el campo, lejos de toda industria, y el efecto inmediato del CB sobre las nubes de DOR. Reich concluyó que el melanor era “una energía orgonica cósmica del espacio exterior carente de oxígeno y de agua” (6: p.17) hambrienta de sustancias esenciales para su vida, ataca las rocas y los tejidos vivientes, para extraer el oxígeno, el agua y la energía orgonica fresca. Esto explica la cianosis y la deshidratación vividas durante” la emergencia “DOR.

Estos descubrimientos condujeron hacia una búsqueda sobre la sequía y la formación de los desiertos. Para probar su teoría según la cual los desiertos habían sido causados por el DOR, Reich se fue a Tucson (Arizona) en el otoño de 1954. El viaje a través de Nueva Inglaterra, los estados del Atlántico Medio y el Sur revelaron una destrucción muy extensa de la vegetación debida a la formación aparentemente acelerada del desierto.

Había un pesado DOR casi en todas partes, especialmente en las grandes ciudades y su periferia. Una sequía que había durado varios años en New Jersey había calcinado la tierra y matado los árboles. La desintegración de las rocas bajo el ataque del melanor era muy avanzada, especialmente en los valles en donde el DOR quedaba suspendido en cortinas gruesas. (7: p. 116).

En Arizona, Reich encontró que la formación del desierto podía ser revertida gracias a la utilización apropiada del cloudbuster para quitar el DOR y reemplazarlo por una energía nueva y por la humedad. Mas tarde, confirmó y amplió su teoría de la formación de los desiertos unida al DOR, al melanor y a otras sustancias pre-atómicas. Y resumió sus descubrimientos como sigue: 

Los procesos de desintegración de los árboles y de todos los bosques es debido a la predominancia de DOR en la atmosfera. Una débil predominancia de DOR provoca la sequía, que, a su vez, aumenta el DOR. Así según un circulo vicioso, la sed de agua aumenta al mismo tiempo que disminuyen las precipitaciones. El proceso es lento y difícilmente discernible. Se conocen pocas cosas sobre la erosión insidiosa de la vida. Cuando la atmosfera se vuelve seca, haciendo perder progresivamente a las nubes su cohesión y haciéndolas dispersarse más fácilmente, el nivel de humedad de la atmosfera baja y la tierra comienza a desecarse. Los niveles del agua bajan igualmente. La Energía Vital de la atmósfera tiene cada vez menos recursos de humedad. Cada vez más, el DOR hace que el calor del sol se transforme en calor “ardiente” o calor “desecante”. Por consiguiente, la Energía Vital, sedienta hasta el extremo, recurre a la humedad presente en la vegetación. El DOR penetra lentamente en los arboles de arriba hacia abajo y de la corteza hacia el interior (7: p.152)

Entonces, Reich describe de manera muy detallada como la vegetación muere lentamente a causa de la sequia y como el suelo atacado por el DOR pasa de una tierra negra y grasa a un suelo endurecido, más tarde a una arcilla roja y finalmente a una arena blanca. En la fase final, incluso la vegetación espinosa secundaria morirá, dejando solo un “paisaje lunar blancuzco”