Hace unas semanas visité con una amiga un pequeño parque de mariposas en el municipio de Castelló d'Empúries. Allí pudimos tomar estas fotografías que queremos compartir con todos/as vosotros/as ya que son un testimonio excepcional de una situación que no es habitual dentro del parque: el abrazo sexual de una pareja de Attacus Atlas , una imagen de la función de superposición.
LA FUNCIÓN DE SUPERPOSICIÓN.
El método de pensamiento
funcional orgonómico fue desarrollado y utilizado por primera vez por Wilhelm
Reich. La aplicación de este método le llevó a comprender y demostrar la
existencia de una energía vital específica a la que dio el nombre de energía orgónica.
Esta energía era pulsátil. Encontró que el principio funcional común de la expansión
y la contracción en los organismos vivos, era la excitación bioenergética caracterizada por la pulsación espontanea. De
sus observaciones concluyó que esta pulsación existía también en la atmosfera.
Reich se planteó la pregunta: ¿Cómo
está el hombre enraizado en la naturaleza? Y concluyó que el hombre estaba
enraizado en ella a través de un principio de funcionamiento común, es decir
las funciones que el hombre tiene en común con las funciones naturales
fundamentales: La Función del Orgasmo (Expansión: tensión, carga), (Contracción:
descarga, relajación) y La Función de Superposición (función fundamental que antecede e induce a la
descarga orgástica.
Reducida a su forma más pura, la
superposición aparece en el reino biológico como el encuentro, gracias a la
atracción y al contacto bio-energético total, de dos corrientes orgonóticas. Los años de observaciones minuciosas y la
puesta a punto de la teoría funcionalista concluyen en el descubrimiento de una raíz esencial por la cual el hombre
está unido a la naturaleza por un principio de funcionamiento común en toda la
naturaleza y que unifica microcosmos y macrocosmos puesto que la superposición es
la obra del origen mismo del universo.
Attacus Atlas. Butterfly Park . Castelló d'Empúries. Girona
Ascensión