LA ECONOMIA DESDE EL PUNTO DE VISTA FUNCIONAL ( I )

La siguiente entrada es la traducción del articulo original en francés  que se publicó en la revista de Sciences Orgonomiques el año 1989. 4rt. Année nº 15/16. L'économie considérée du point de vue fonctionel.

Wilhelm Reich a lo largo de más de veinte años de trabajo y esfuerzo desarrolló un nuevo tipo de pensamiento: el pensamiento funcional. Como el mismo Reich dijo , tuvo lugar con coherencia en los procesos de pensamiento y observaciones que le sorprendieron incluso a él. La penetración conseguida por el funcionalismo se puede aplicar a cualquier campo.

"Cuando dije antes que me encontré en un “nuevo reino de pensamiento” esto no significa que el funcionalismo orgonomico estaba ”preparado” y simplemente esperándome, o que podría simplemente apropiarme de la técnica de Bergson o Engels y aplicarla suavemente sobre el área de mi problema. La formación de esta técnica de pensamiento fue en ella misma una tarea que tuve que alcanzar en la actividad práctica como médico y científico luchando contra las interpretaciones mecanicistas y místicas de la materia viva.

Por lo tanto no he desarrollado “una nueva filosofía” que adyacente a, o en conjunción con otras filosofías, tratara de traer los procesos de la vida más cerca de la comprensión humana, como algunos de mis amigos creen. No, no hay filosofía involucrada en absoluto. Más bien, estamos tratando con una herramienta de pensamiento que debemos aprender a aplicar antes de investigar la sustancia de la vida. El funcionalismo Orgonomico no es un artículo de lujo para ser usado o quitado a discreción. Consolida las leyes conceptuales  y las funciones de percepción que deben ser bien conocidas si vamos a permitir que los niños y los adolescentes crezcan como seres humanos que afirman la vida en este mundo, si queremos volver a  armonizar al animal humano con su constitución natural i las naturaleza que lo rodea."

Ether, God and Devil. Wilhelm Reich

LA ECONOMÍA CONSIDERADA DESDE EL PUNTO DE VISTA FUNCIONAL

Curtis Barnes

Licenciado en derecho, New York

Mientras hacía fotocopiar una redacción precedente de este artículo, la mujer joven que se ocupaba me pregunto: ¿Se trata de orgasmos? Cuando le respondí que ese no era el caso, que se trataba de un articulo sobre economía, dijo: “¡Oh, yo no comprendo nada de economía!” Esta conversación muestra el abismo que hay entre el trabajo y otras funciones vitales.

Los temas sexuales son considerados como una cosa vital, excitante, un tema de discusión fácil; el trabajo y la economía  son por el contrario vividos como incómodos, mecánicos y terriblemente complicados; como si la excitación de la vida debiera cesar temporalmente mientras se trata de ponerse a trabajar.

Si la economía es considerada como un tema extraño a la vida y a la orgonomía, es porque los conceptos tradicionales de la economía se concentran casi totalmente sobre  los aspectos mecánicos y cuantitativos de los productos del trabajo, más que sobre la función humana en este campo.

En este articulo trataremos de encontrar una aproximación mejor a  fin de comprender de que forma estas funciones   influencian el trabajo y los intercambios culturales, todo esto en términos de función bioenergética y de salud emocional. Si encontráramos el coraje de quitar la mascara a lo convencional y a los prejuicios, nuestro tema cesaría de ser un monstruo irreducible, podríamos ver  entonces que se compone en realidad de organismos humanos vivos. Con su comprensión de un orden social racional, la orgonomía nos permite  utilizar bien la función económica.

La tarea esta lejos de ser simple. Primeramente, el terreno de la economía es tan extenso que nosotros solo podemos presentar aquí un breve aspecto parcial; en segundo lugar un acercamiento funcional de la economía llevaría a conclusiones que  están en desacuerdo con numerosas posiciones ideológicas sostenidas con tenacidad. Este articulo no es mas que una primera tentativa hacia una mejor comprensión de la función económica. Ha germinado de un entendimiento personal en el que era necesario aplicar los principios de la orgonomía a este importante aspecto del trabajo que representa la economía, siendo así, que  ocupa un gran lugar en nuestra vida (…)

Sociedad y trabajo

He aquí un ejemplo de inter-relación económica. Yo tenía necesidad de  fotocopias y fui a hacerlas en una tienda. Un paso muy simple visto desde este ángulo. Pero si consideramos que para pagarlas he tenido de utilizar el dinero que me pagó el Señor X por haberle construido una bodega para vinos, él mismo para pagarme ha tenido que construir y vender piezas de helicóptero al Señor Y. Por otra parte, la vendedora que me ha hecho las fotocopias utilizará una parte de su salario para comprarse una ropa hecha por un modisto de Nueva York, o una botella de vino para beber con su  amigo o, para adquirir una cesta “con la que sueña” trenzada sin duda por un hombre o por una mujer de un pueblo africano.

Pero la cadena de intercambios no se queda aquí, ya que para que este articulo se publicado, las fotocopias en cuestión deberán ser dactilografiadas por una secretaria y luego impresas en una revista.

Una vez la revista impresa, será enviada por correo, después será distribuida por el cartero. Gracias a las subscripciones de los lectores de la revista, ésta ha podido pagar el trabajo del impresor y de los trabajadores de correos.

Esto representa un tejido inmenso e impresionante, comprendiendo cosas tan diferentes como helicópteros, almacenes, imprentas, objetos de arte y, de la composición. Y lo que es más importante aún, es un tejido de lazos y conexiones comprendiendo personas que cooperan de forma práctica y racional, ayudando de esta forma al otro a satisfacer sus deseos y sus necesidades personales muy especificas. Tal es cuadro apreciado, un cuadro muy diferente de las historias de sufrimiento, de crisis, de competición violenta y de explotación que uno escucha de la boca de los políticos, economistas y de los medios. Este no es el cuadro de personas que se tiran a la yugular el uno al otro o que están en un gran desorden, sino el cuadro de personas que se dan la mano, cooperando funcionalmente para hacer su vida más agradable.

Es difícil escapar a la sensación de estar en presencia de una formidable fuerza social que tiene sus propias leyes. Esta claro que esta fuerza no está creada por los políticos ni los economistas, a pesar de que ellos reclaman a menudo el mérito. No es el resultado de un movimiento caótico y mecánico que tiene necesidad de ser orientado y dirigido, tampoco esta regido por una “mano invisible” mística. Esta fuerza social es el resultado funcional de actividades reales y reflexionadas de seres humanos vivos, en consecuencia  ellos utilizan el trabajo y el intercambio para traer alegría y placer a su vida. La cuestión no es saber como modificar y controlar, sino como comprenderlo y entonces admitirlo y protegerlo.

( ...continúa)